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El robot colega y yo: Una mirada más cercana a la interacción hombre-robot.

Cada vez más personas trabajan con robots en su vida cotidiana. ¿Cómo reacciona la gente ante la interacción directa con los robots? ¿Aceptan y confían en sus “colegas mecánicos”? KUKA y la Universidad Deportiva Alemana de Colonia están investigando estas cuestiones en un estudio.

“Con nuestros productos, estamos cambiando el mundo del trabajo, por lo que tenemos que analizar los efectos de este cambio en las personas. Somos conscientes de esta responsabilidad social”, afirma Nadine Bender, analista senior de Impactos Sociales de la Robótica en la Investigación del Grupo KUKA.

Por ello, en el proyecto de investigación RoSylerNT con el Ministerio Federal de Educación e Investigación y la Universidad Deportiva Alemana de Colonia, KUKA investiga los aspectos psicosociales de la interacción entre humanos y robots. En el marco de este proyecto de investigación se han desarrollado diversos sistemas de prueba para el entrenamiento neuromuscular. Tras más de tres años de investigación, el proyecto se concretó en una semana de pruebas a finales de septiembre de 2020:

Cada día, personas no profesionales de entre 18 y 49 años realizaron tareas con un sistema robótico sensible de KUKA. Debían transportar una mesa, unas veces con un humano y otras con el robot. Mientras tanto, la Universidad del Deporte de Colonia prestaba atención a los parámetros físicos, y KUKA examinaba aspectos como la aceptación de la tecnología, el miedo y la confianza. Una de las personas que participaron en la prueba es una periodista del periódico Augsburger Allgemeine Zeitung, y dio cuenta de primera mano de la semana de pruebas.

El hombre tiene el control.

Gracias al reconocimiento facial integrado, el robot saludó personalmente a su interlocutor. El sistema puede percibir la postura, el movimiento y el estrés de la persona y así adaptarse a ella y a la situación correspondiente. Así se garantiza que los usuarios y los pacientes no se vean sobrecargados o incluso en peligro. “Al cargar con el robot quedó claro que el ser humano tiene el control y el robot sólo hace lo que se supone que debe hacer. Así se evitaron las dificultades de comunicación”, dijo uno de los probadores tras su despliegue.

Investigación básica para nuevas formas de cooperación.

De este modo, KUKA lleva a cabo una investigación básica en red con la Universidad del Deporte de Colonia y el BMBF. Los resultados se trasladarán a otros productos. Porque: “Especialmente en el ámbito de los cuidados, la cooperación con robots es cada vez más importante. Pero también en la industria, las personas y las máquinas inteligentes trabajan cada vez más cerca”, afirma Nadine Bender.

El proyecto de investigación, que ahora evaluará los resultados de la semana de pruebas en Augsburgo, se desarrollará hasta el 31 de enero de 2021.

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