Nuestros detectores fotoeléctricos con supresión de fondo detectan objetos dentro de una distancia de actuación establecida, sin verse influidos por un fondo reflectante y prácticamente sin perder capacidad de detección independientemente del color y la superficie del objeto. El objeto y el fondo se pueden diferenciar con seguridad, ya que estos detectores fotoeléctricos se caracterizan por su bajo desplazamiento de valor del gris e histéresis.
Como el emisor y el receptor están alojados en la misma carcasa, se ahorra espacio y podrá montar estas fotocélulas de forma muy sencilla y alinearlos rápidamente al objeto. El haz luminoso claramente visible en las versiones con luz roja y láser sirve también de gran ayuda. Con el teach-in o a través de un potenciómetro, se pueden ajustar fácilmente muchas versiones de sensores. También hay versiones con una distancia de conmutación fija.