Cuando los robots se vuelven creativos.
Los robots de KUKA realizan trabajos de soldadura y láser en automóviles, así como en máquinas de embalaje y carga. En un entorno industrial, son una parte integral del proceso de producción. Pero, ¿podría un robot KUKA tener también un potencial creativo? Según Karl Singline, sí. Y tiene mucho éxito con este enfoque.
Singline vive y trabaja en Tasmania, Australia. Es arquitecto y diseñador y ha trabajado en grandes proyectos como el Burj Khalifa o el centro comercial de Dubai, edificios que no sólo tienen importancia funcional, sino que también plantean grandes exigencias de diseño y creatividad.
Diseño y alta tecnología.
Pero Karl Singline no se ve sólo como arquitecto. Si uno se pasea por su cuenta de Instagram, verá inmediatamente que este hombre combina ambas cosas: su entusiasmo por la gran arquitectura y su fascinación por la robótica. A veces, Singline posa en las fotos durante el almuerzo con uno de los robots industriales de color naranja de KUKA, otras veces se mezclan entre imágenes de edificios llamativos y diseños creativos del LBR iiwa o de un robot KR Quantec.
¿De qué se trata? Karl Singline no sólo vincula el diseño y la tecnología a Instagram. El potencial creativo de los robots industriales desempeña un papel importante en su trabajo diario como arquitecto y diseñador. No es tanto su estilo característico lo que le distingue como arquitecto, sino sobre todo el enfoque que pone en combinar su trabajo con la alta tecnología. «He abandonado los métodos clásicos de arquitectura y diseño», dice, «quiero dedicarme plenamente a las posibilidades de la robótica en este ámbito. Porque el uso de robots hace posibles diseños que no serían posibles con los métodos tradicionales, dice. Y los robots ayudan a convertir estas ideas en realidad.
Arquitectura con asistencia robótica.
Empezando por aplicaciones sencillas en el rango bidimensional, en el que el robot realiza bocetos en papel, por ejemplo, hasta procesos complejos como la extrusión o las tareas de recogida y embalaje: Singline se dio cuenta muy pronto de cómo puede utilizar los robots de KUKA para los requisitos especiales de la arquitectura. Utilizando software como Grasshopper o herramientas especiales de KUKA como KUKA prc o HMI, puede dibujar, fresar o posicionar los robots, de forma precisa y fiable. «El fresado con un robot de cinco ejes permite obtener resultados más uniformes y con menos aristas», afirma, en contraste con el CNC de tres ejes.
Singline también se ha convertido en una especie de estrella de Internet en el sector. La primera vez que tuvo contacto con los robots KUKA fue en 2015, mientras preparaba su máster, y rápidamente reconoció el potencial que se extiende más allá del entorno industrial. «En ese momento, sin embargo, había muy poca información disponible», dice. Y eso le dio a Singline una idea: quería compartir sus hallazgos con otros arquitectos y estudiantes. Para ello, sigue produciendo pequeñas películas y explicando en estos tutoriales, que distribuye a través de su canal de YouTube, cómo se pueden utilizar los robots también en procesos creativos. KUKA conoció a Karl Singline y sus películas de YouTube, y el resultado fue una cooperación que continúa hasta hoy.